En el corazón del mar En el invierno de 1820, el ballenero de Nueva Inglaterra Essex fue agredido por algo a lo que nadie podía dar crédito: una ballena de tamaño y voluntad descomunal, con un sentido de la venganza casi humano. Este hecho real que supuso un desastre marítimo fue la inspiración para Moby-Dick de Melville. Pero la novela solo contó la mitad de la historia. “En el corazón del mar” revela las horribles consecuencias del encuentro, cuando los supervivientes de la tripulación fueron forzados hasta el límite y se vieron obligados a hacer lo impensable para mantenerse vivos. Enfrentándose a las tormentas, el hambre, el pánico, y la desesperación, los hombres llegan a dudar hasta de sus creencias más profundas, desde el valor de sus vidas a la moralidad de su oficio, mientras el capitán intenta orientarse en el mar abierto y su primer oficial sigue empeñado en conquistar a la gran ballena.
Palm Beach Un grupo de amigos de toda la vida se reúne para celebrar un cumpleaños especial, con la icónica Palm Beach de Sydney brindando un impresionante telón de fondo para el drama que se desarrolla. Los buenos tiempos pasan, con muchas risas, comidas lujosas, vino fluido y música fantástica, pero lentamente aumentan las tensiones y surgen secretos profundos.
El consejero Un respetado abogado (Michael Fassbender) del sudoeste de Estados Unidos decide participar por primera vez en una operación de tráfico de drogas en la frontera mexico-norteamericana. Su principal motivo es el de obtener dinero rápido y poder casarse con su querida novia, la dulce Laura (Penélope Cruz). Su conexión con los cártel es Reiner (Javier Bardem), un ostentoso capo de la droga irremediablemente enamorado de su chica, la sexy y ambiciosa Malkina (Cameron Diaz), y Westray (Brad Pitt), un intermediario amigo suyo.
Pedirlo a gritos Después de que una camarera de un pequeño pueblo es agredida sexualmente después de una cita con una vieja amiga, se hace amiga de un misterioso extraño que la presenta a una pandilla de mujeres.
El irlandés Pennsylvania, 1956. Frank Sheeran, un veterano de guerra de origen irlandés que trabaja como camionero, conoce accidentalmente al mafioso Russell Bufalino. Una vez convertido en su hombre de confianza, Bufalino envía a Frank a Chicago con el encargo de ayudar a Jimmy Hoffa, un poderoso líder sindical relacionado con el crimen organizado, con quien Frank mantendrá una estrecha amistad durante casi veinte años.El irlandés Criticascribo esta reseña no por merecimiento de la película, sino por el shock de ver esta ovación unánime en las primeras críticas. El plantel hace prever que la película va a ser de las que marcan un hito en la historia del cine y siendo, además, una despedida por todo lo alto de muchos integrantes seguramente. ¡Qué decepción!Empiezo diciendo que me parece una película mal planificada: hacer pasar a octogenarios por actores de 30 años por mucho rejuvenecimiento facial da para escenas sonrojantes. El Procesamiento Digital de Imagen no puede con todo y no podemos exigir a ciertos actores ciertos movimientos gráciles (hay una escena que se nos viene a la cabeza con un De Niro que apenas se tiene en pie... da para chiste). También hace que la película tenga como un olor a senectud toda ella: personajes en su lozanía que aparentan 20 años mayores y casados con jovencitas. El Padrino II llevó mucho mejor esto con la dupla De Niro - Brando. MUCHO MEJOR sin tirar de efectos digitales.El guion trata de contarnos muchas cosas de la historia de EE.UU. y de plantarnos en el contexto histótico: el sindicato de camioneros, revolución cubana, guerra fría, los Kennedy, el papel de la mafia, etc. Sin embargo, siento que son 3 horas y 30 minutos muy mal aprovechados porque en ningún momento aterrizamos verdaderamente en ninguna trama ni hay un desarrollo fluido ni narración óptima de ninguna de ellas. Quiero reseñar también que algunos diálogos de la película me parecen más bien de patio de colegio: algunos discursos a los sindicalistas llevados a un populismo extremo que rozan la caricatura o alguna conversación entre mafiosos y sus disputas como niños consentidos...no veo la intensidad ni la calidad de escritura de los diálogos de El Padrino, para nada.En cuanto a las actuaciones, no sé si podría achacarse al exceso de pirotecnia digital, pero la decepción con De Niro es importante. Durante sus épocas de "juventud" lo veo más con su talante y dejes de abuelo adorable que de tipo duro y matón. La actuación de Pacino, encarnando a Jimmy Hoffa, bien, algo histriónico (supongo que irá con el personaje), pero no me parece su mejor interpretación. Joe Pesci, para mí, muy bien, el mejor del trío.Por otro lado, nada que achacarle a la factura de la película: buena ambientación, banda sonora, fotografía, etc. No es una película low cost, está claro.En resumen: exceso de metraje y de expectativas. Más duración no es sinónimo de calidad y ésta NO es la mejor película del año.