Formato | Idioma | Descargar |
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1080p Dual | Latino | Descargar |
El invitado a la boda La película sigue a un misterioso joven, británico y musulmán (Dev Patel), en su viaje a través de la India y Pakistán.
Cámara policial La película cuenta como en varios policías de Los Ángeles están siendo atormentados por un malévolo espíritu, que está relacionado con el asesinato de un joven negro a manos de dos policías, que tras saber que fueron grabados por una cámara de seguridad que fue destruida para su encubrimiento. Cámara policial Critica Es una película con una premisa muy interesante ya que no es la típica película policial si no que se le mete un sentimiento sobrenatural que la hace interesante. En su apartado policial cumple y muy bien con las expectativas, respeta de gran manera el trabajo policial enseñando el trabajo que este realiza sin ningún tipo de ficción, los problemas raciales que ocurren en algunos departamentos de policías y detalles mínimos que deben de tener muchos cuerpos de policías en el mundo. Pero en su apartado sobrenatural o de más ciencia ficción no es tan maduro como su parte policial. El argumento relacionado con el ente sobrenatural que hace presencia en la historia empieza muy bien, dejando mucha intriga y misterio por el camino pero una vez que pone al espectador en medio situación se ven por donde van los tiros desde muy lejos. Que tampoco haya una explicación clara del por qué de la presencia del otro mundo le quita mucha veracidad a la historia. Respecto a eso y como hago entender en el título de esta crítica, esa parte sobrenatural en momentos finales es muy floja afectando demasiado a la película como conjunto, llegando a parecer por momentos una película se sobremesa.
Un tiburón hambriento comienza a alimentarse de los desprevenidos visitantes de un lago en un pequeño pueblo de Texas.
Dos colgaos muy fumaos Harold Lee se encuentra atrapado en un trabajo de bajo nivel en el mundo de las inversiones bancarias, haciendo horas extras y claramente despreciado por sus compañeros, quienes no se molestan en ocultar que le pasan su propio trabajo para que lo termine el fin de semana. Para terminar de complicar las cosas, no se atreve a hablarle a su atractiva vecina cuando se la encuentra en el portal. Mientras que Harold trabaja, su mejor amigo, Kumar Patel hace todo lo que puede para evitar enfrentarse al mundo real, manteniendo su modo de vida ocioso y despreocupado, mientras que simula vagos intentos de ser admitido en la facultad de medicina para seguir la tradición familiar.
La memoria de un asesino Alex, un asesino a sueldo, descubre que se ha convertido en un objetivo después de que se niega a completar un trabajo para una peligrosa organización criminal. Con el sindicato del crimen y el FBI persiguiéndolo, Alex tiene las habilidades para mantenerse a la vanguardia, excepto por una cosa: está luchando con una pérdida de memoria severa que afecta todos sus movimientos. Alex debe cuestionar cada una de sus acciones y en quién puede confiar en última instancia.
Rocky Balboa Corre el año 2005 y el campeón Mason Dixon no encuentra un rival a su altura en un boxeo devaluado. Han pasado 30 años desde que Rocky Balboa (Sylvester Stallone), un hombre sin futuro, tuvo un golpe de suerte que le brindó la oportunidad de boxear y llegar a enfrentarse en el cuadrilátero contra el campeón de entonces, Apollo Creed. El coraje y perseverancia de Rocky, tanto en la vida como en el cuadrilátero, brindó esperanza a millones de personas. Ahora, la gloria del que fue bicampeón del mundo ya se ha ido, y Rocky se pasa las tardes contando viejas historias a los clientes de su restaurante Adrian's, que lleva el nombre de su ya fallecida esposa, por quien guarda un silencioso luto. Su hijo (Milo Ventimiglia) no desea pasar tiempo con él; se encuentra demasiado ocupado tratando de vivir su propia vida. El tiempo y los golpes han hecho más humilde a Rocky y en su corazón, él todavía es un luchador... Rocky Balboa Critica Como lo oyen (o leen), llevaba puestos los guantes para la ocasión (rellenados sabiamente de metal y objetos contundentes), mi dedo pulgar estaba bastante suelto para introducirlo gentilmente en los ojos del ganador del Razzie al peor actor del siglo (entre otros diez galardones de este ilustre premio y otras treinta nominaciones en diferentes categorías) e iba preparado con linimento en los guantes para cegar definitivamente al que fue nominado al Oscar al mejor actor por “Rocky”.Finalmente me tuve que quitar los guantes y darle un efusivo abrazo aunque lo mismo le nominan, con tal de joder. ¿Qué sería una gala de los Razzies sin Rambo? Y es que ningún crítico americano se la ha cargado (de momento) y su paso por el box office no es sinónimo de fracaso. Y en España, como somos diferentes, Francisco Marinero le ha colocado todo un señor rosco. No será el único. Es cierto que los años pasan (como el rostro de Stallone con sus 60 añitos por mucho bisturí y Botox que eviten las arrugas), que el nivel de la saga había quedado por los suelos y que supone todo un acierto que Rocky VI sea “Rocky Balboa”. Es precisamente su handicap: el de un revival efectista y funcional que hace emerger los buenos sentimientos y poso de buen cine para masas que desprendía el “Rocky” de 1976. El de un caballo (o perro viejo en este caso) por el que nadie da un duro y a la hora de la verdad da el callo, aunque le pongan la cara como un cuadro (de Picasso).Balboa se ha convertido en todo un santo, cuyos pensamientos son equiparables a la inocencia de Mr. Chance, cuya artritis y pitopausia no le impedirá dar su último gancho y dejar por los suelos al actual campeón que carece de público, carisma ni empatía. Eso es cosa de Rocky y todo esto tiene una moraleja: nunca el cruce del inserso y el boxeo depararon tantas emociones y risas.Alma de telefilme, entrañas y sangre caduca desparramada en un combate, sentimientos crepusculares sin caer demasiado en el ridículo y un combate final simplemente brillante por cortesía de la HBO y el PPV. ¿Se podía hacer con semejante material algo decente? “Rocky Balboa” es la respuesta. La película se tiene que disfrutar como un decente cierre y por lo tanto una simple curiosidad, aunque recomendable e imprescindible para los nostálgicos. Con unos títulos de créditos finales que refuerzan el contenido: todos en el fondo somos o queremos ser como Rocky, y si en nuestra cuenta corriente aparecen los ceros que tendrá la de Stallone llegaremos a un orgasmo de placidez sin paliativos.